13 de junio de 2011

Liberarse de resentimientos pasados

El ejercicio que propongo hoy también es muy facilito, y sobre todo, liberador. Muchas veces nos quedamos enganchados en resentimientos, penas, rencores... Tenemos la sensación de que no dijimos, expresamos o dejamos salir todas las sensaciones y pensamientos que teníamos, que por miedo o vergüenza se nos quedaron dentro. Este bloqueo, que puede ser consciente o inconsciente, nos impide avanzar libres y sin cargas del pasado.
Este ejercicio se puede hacer con todo tipo de relaciones pasadas familia, pareja, jefes, amigos, compañeros... y, por experiencia propia, os animo a probarla con ex parejas, aunque conscientemente no notéis ese resentimiento, así podéis comprobar si aún queda algo que liberar o no.
Elegid un momento en el que estéis solos (en casa, dando un paseo por el campo, en el coche...) y empezad a decir a la persona de la que se trate lo que os venga a la cabeza. Soltaos y no os juzguéis... hablad, gritad, llorad, insultad lo que haga falta si es lo que os pide el cuerpo. Igual al principio os sentís un poco tontos hablando solos (porque es muy importante expresarlo verbalmente, no sólo pensarlo), pero continuad y ya veréis como poco a poco le vais cogiendo el gusto y os vais creciendo. 
La base de la técnica es sacar fuera, verbalizar, todo lo que tenemos guardado dentro para que nos deje avanzar. Y una vez expresado, cuando notamos que la intensidad de la rabia, la pena, o la emoción que sea decae, ya podemos ver para qué vino esa persona o situación a nuestra vida, qué teníamos que aprender del proceso. Así traemos conciencia a nuestra vida y nos ponemos en una situación en la que podemos perdonar no sólo mentalmente, sino de corazón, que es como se sana de verdad.
En mi caso la experiencia fue muy reveladora, porque me di cuenta de guardaba aún mucho resentimiento a una persona a la que conscientemente no se lo tenía y en la que ni pensaba. 
Por cierto... si decidís hacerlo en el coche, mejor que sea en una carretera, porque si lo hacéis en el atasco de la M30 o en algún semáforo el del coche de al lado puede quedarse loco al veros. ;-)